La información contable que se deriva de los registros de las transacciones económicas de las empresas, así como de los entes públicos se fundamenta con las Normas de Información Financiera que establecen obligaciones generales y particulares para este tipo de información.
Se dividen en tres grandes apartados:
Además, se les identifica con el nombre de “Series”, Serie A; muestra la estructura, organización básica, objetivos e información que se presentan en los estados financieros, Serie B; cálculo, metodología, elaboración, presentación y revelación aplicables a los Estados Financieros en su conjunto, Serie C; normas de valuación, presentación y revelación de partidas específicas que integran los Estados Financieros, Serie D; aplicable a problemas de determinación de resultados, Serie E; aplicable a actividades especializadas (agricultura, donativos, circulares) ; orientaciones, aclaraciones o recomendaciones a las normas.
Interpretaciones a las Normas de Información Financiera conocidas como NIF’s
Las Normas de Información Financiera se estudian y actualizan por la CNIF (Comisión Investigadora de las Normas de Información Financiera) del IMCP; aun cuando son derivadas por una organización civil estas son invocadas en la Ley del Impuesto Sobre la Renta (LISR) ya que en su artículo 180 último párrafo, señala que los ingresos, costos, utilidad bruta, ventas netas, gastos, utilidad de operación, activos y pasivos, se determinaran con base en las normas de información financiera.
Por lo anteriormente expuesto, debemos considerar de manera importante que los registros contables son la base de adecuados cálculos financieros, fiscales y documentales de defensa en cualquier tipo de acción legal.
AUTOR: Dr. C.F. G. Gamaliel Vela M.
Socio fundador y Director General de Corporativo Velamonts S.C.